Fin de curso Rockero para los “peques” hospitalizados

El pasado viernes 21 de junio, el Hospital Infantil Miguel Servet de Zaragoza celebró un fin de curso musical bajo el lema «Todos podemos sonar». Los niños hospitalizados disfrutaron de un emocionante concierto de Rock en Familia, gracias a la colaboración de Cierzo Educación Musical, la Asociación Latir y la Fundación Sesé.

La actividad no se limitó a ser un concierto pasivo. Gracias a las musicoterapeutas Carla Navarro y Loreto Caso de la Asociación Latir, se organizó una sesión interactiva donde los niños hospitalizados se convirtieron en percusionistas de la banda. Utilizando boomwhackers, claves, tambores, panderos, shakers en forma de huevo y materiales de estimulación sensorial como pañuelos y cintas de colores, los pequeños participaron activamente en la creación musical.

La iniciativa fue apoyada por voluntarios de la Fundación Sesé, quienes actuaron como acomodadores en el cine, como hacen cada martes, y participaron de forma activa en el evento musical. El objetivo era humanizar el entorno hospitalario y ofrecer un momento de alegría y distracción a los niños y sus familias, convirtiendo una tarde ordinaria en una experiencia musical inolvidable.

A las seis de la tarde, los niños hospitalizados comenzaron a llegar al salón de actos. No fue fácil acomodarlos, ya que muchos de ellos venían con gotero incluido. Pero no vinieron solos, sino acompañados de sus padres, algún hermano y amigo. También contaron con la ayuda de los «acomodadores», que en este caso fueron voluntarios de la Fundación Sesé. Gracias a su experiencia en la actividad semanal ‘En el hospi estoy de cine’, ayudaron a ubicar a todos los pequeños para que pudieran disfrutar de la actuación.

Pablo Ferrán, responsable de programas y voluntario de la Fundación, afirmó que «es realmente conmovedor poder ser parte de momentos como este. Ver las sonrisas en las caras de estos niños es muy gratificante. Cada semana con nuestra actividad vemos lo importante que es traer un poco de alegría y distracción a sus días de hospital. Hoy, con este concierto tan especial, sabemos que estamos contribuyendo a que tengan un recuerdo inolvidable que además pueden compartir con sus familias. Es un privilegio poder colaborar para que disfruten de esta experiencia única».

Los estudiantes de violín interpretaron conocidas piezas de rock para los niños hospitalizados. Esta actividad fue posible gracias a la colaboración de Cierzo Educación Musical, la Asociación Latir y la Fundación Sesé. A las seis de la tarde, el salón de actos de la planta 4ª del Hospital Materno Infantil Miguel Servet de Zaragoza se transformó en un escenario vibrante y lleno de emoción, ofreciendo a todos los presentes una tarde inolvidable llena de música y alegría.